Silvia LERÍN
Artes plásticas
Artista becada por el Ayuntamiento de Valencia
silvialerin.com
Silvia Lerín es licenciada en bellas artes por la Universidad Politécnica de Valencia en 1998. Desde entonces ha realizado numerosas exposiciones individuales en España, Reino Unido y Alemania. Su obra también se ha visto en ferias y en exposiciones colectivas en Estados Unidos, Reino Unido, España, Finlandia y Alemania.
Ha sido premiada y becada por instituciones como: Pollock-Krasner Foundation, The Annex Collection Award, la Freelands Foundation, la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos, o el Ministerio de Cultura Español.
Ha sido invitada a participar en varias residencias artísticas: The Florence Trust Residency (Londres), ESXLA (Los Angeles) y The Prairie Center of the Arts. (Peoria, IL, US)
El trabajo de Silvia Lerín comprende mayoritariamente pintura e instalaciones. Ambas prácticas se basan en la manipulación del material mediante pliegues, cortes, superposiciones creando formas hasta alcanzar un equilibrio en la composición.
En este proceso de creación, muy a menudo combina la pintura con otros materiales a través de collages y/o ensamblajes. Esta amalgama de diferentes materiales ofrece así una mezcla de texturas que enriquece la experiencia visual de la pieza mediante impresiones de sombras, pliegues y fisuras.
En su trabajo, destaca la importancia de la relación física con el material. Lo investiga y explora sus posibilidades expresivas para crear obras que sugieren objetos, lugares o experiencias y que, tras una pausada observación, desencadenan una especie de reconocimiento del objeto, del lugar o de la emoción que lo inspiró mediante nuevos caminos de la imaginación. En este sentido, los títulos que Silvia Lerín elige para sus obras tienen un papel importante en este proceso de reconocimiento, a veces dando pistas, otras veces actuando como una clara declaración de intenciones.
En residencia
En la Casa de Velázquez Silvia Lerín continúa su proyecto ‘Copper skin’: una serie autobiográfica que investiga la manera en la que el cobre, durante su proceso de oxidación, produce un verde aturquesado único sobre su superficie resultando en una forma de epidermis del metal.
Para la artista, este proceso tiene una connotación muy poética, una especie de resurgir fenixiano: el óxido en vez de evocar deterioro y decadencia se convierte en belleza para el ojo además de ser una piel ‘protectiva’ del cobre; una metáfora que responde de manera muy especial a la vida personal de la artista. En este proyecto, Silvia Lerín se enfoca en esa segunda mirada que puede hacernos entender y ver la belleza de algo que nos parecía viejo e inservible.
Durante su residencia, su trabajo se centra en la creación de obras de texturas variadas, combinando técnicas de grabado y de pintura, creando efectos de ‘cobre oxidado’, jugando con las formas y los volúmenes. En muchos de los casos, sus obras se transforman en pinturas escultóricas que van creando nuevas sombras y perspectivas, interactuando de manera instalativa con el espacio de exposición.